Homelia Guadalupe 2024

Hermanos y hermanas

¡Que el Señor os dé la paz!

Hoy con espíritu filial y llenos de alegría, celebramos la memoria de la Virgen María de Guadalupe, patrona de América Latina. Y nuestra Iglesia católica de Chipre reúne a todos sus hijos latinoamericanos para esta solemnidad aquí en Limassol. Que hermosa esta imagen: La Virgen María reuniendo a sus hijos… la madre reuniendo a sus hijos e hijas (somos aquí de muchas naciones diferentes:…). Hoy celebramos y cantamos con ella y junto a ella, el magnificat: todas las generaciones me llamarán “Bendita”.

La aparición, el 9 de diciembre de 1531, de la “Morenita” al indio Juan Diego, en Guadalupe, México, es un acontecimiento que ha dejado una profunda huella en la religiosidad y la cultura mexicana. El acontecimiento guadalupeño fue un caso de “inculturación” milagrosa; donde la virgen se viste, habla y se adentra en la historia y cultura del pueblo mexicano; Habla el idioma del indio Juan Diego. Meditar hoy este acontecimiento significa situarse en la escuela de María, maestra de humanidad y de fe, anunciadora y sierva de la Palabra, que debe brillar con todo su esplendor. Ella nos enseña, hombres y mujeres de iglesia, que no hay evangelización sin inculturación; la condición del hombre, su dolor, sus luchas, sus sueños, sus orígenes y sus esperanzas es la gramática humana que no se puede ignorar. Cada vez que la sociedad, e incluso la iglesia, desprecia o complace la gramática humana, comete grandes errores. Guerras locas, injusticias, destrucción. Podemos hacer una lista: el exterminio de los Maia y Asteca en México, el genocidio de los armenios, el holocausto de los judíos, la violencia sangrienta con el martirio de los cristianos de Irak, Siria, Libia; y lo que está sucediendo ahora en Gaza… y todavía podemos continuar con esta terrible lista. Incluso aquí en Chipre… “La morenita” la Virgen de Guadalupe, nos enseña, nos guía a no permanecer indiferentes al dolor, al sufrimiento de nuestros hermanos y hermanas: inmigrantes, refugiados y aquellos en dificultad….

La Virgen de Guadalupe, maestra de misión y humanidad, nos ayuda a vivir este tiempo de Adviento, donde la palabra del Evangelio de esta solemnidad nos llama a vivir bien este tiempo de espera. No es raro que, mientras esperamos un acontecimiento importante en nuestra vida, este pase de largo sin que nos demos cuenta. Esto es lo que les sucedió a los escribas en la época de Jesús. Esperaban ansiosamente a Elías que abriría el camino al Mesías. Viene en la persona de Juan Bautista y no se dan cuenta. De hecho, cuando Herodes lo mató en la prisión, lo disfrutaron, sin siquiera una voz de reproche.

Hermanos y hermanas, en medio de las tantas dificultades que estamos viviendo en estos tiempos: guerras, divisiones y también mucha confusión, guiados por la Santísima Virgen queremos renovar nuestro deseo de fidelidad al Evangelio y no ser indiferentes. . Y sobre todo sin hipocresía…. Y no eligiendo entre los rumores y las falsas profecías que nos convienen. San Agustín dijo: la Verdad está dentro de nosotros. Dios habla al corazón del hombre, habla a través del evangelio, la liturgia, el magisterio, los acontecimientos personales, familiares, sociales y a través de los pobres y los que sufren. No lo dejemos pasar, vayamos hacia la Navidad, que es Jesús. Ya es tiempo de despertar del sueño, porque nuestra salvación está ahora más cerca que cuando nos hicimos creyentes. Con la intercesión de la Virgen de Guadalupe juntos oramos para que reconozcamos al Señor en su paso por nuestra historia, en nuestros días, en nuestros tiempos, en nuestros esfuerzos; haciendo más sensibles nuestros corazones a la presencia del Señor Jesús, que viene y aún imploramos: maranath… Viene el Señor Jesús, viene por la intercesión de la Santísima Virgen de Guadalupe… ¡Amén!